La lepra no ha desaparecido en Casanare, esté alerta a los sintomas

La Administración Municipal “Yopal, Ciudad Segura”, mediante la secretaría de Salud, tiene la responsabilidad de garantizar una atención individual integral a la población afiliada y beneficiaria, por lo tanto, ha desarrollado estrategias en busca de llegar a diferentes poblaciones para hacer prevención en cuanto a la Lepra o enfermedad de Hansen.

El comportamiento de la enfermedad de Hansen en Yopal durante los últimos tres años, se ha reflejado de la siguiente forma:

– Año 2020 = 1 caso

– Año 2021 = 2 casos

– Año 2022 = 1 caso

Mostrando una frecuencia por género así:

– Masculino = 75%

– Femenino = 25%

Por área de residencia:

– Urbano = 75%

– Rural = 25%

Por grupos de edad:

– Población 30 – 59 años = 40%

– Mayores de 60 años = 60%

Por nacionalidad:

– Colombiana = 75%

– Migrante = 25%

El 100% de los casos fue clasificado como lepra multibacilar, lo que implica mayor riesgo de transmisión, y que el 20% de los casos presentó grado 1 de discapacidad.

Cada año la Administración Municipal “Yopal, Ciudad Segura”, se une a esta conmemoración invitando a crear conciencia social sobre esta enfermedad; ante la presencia de alguno de los signos y síntomas relacionados, se promueve la consulta médica en las IPS o asesoría en la secretaría de Salud Municipal, programa de Mycobacterium.

¿Qué es la Lepra o enfermedad de Hansen?

Es una enfermedad infecciosa curable, causada por los bacilos Mycobacterium leprae y Mycobacterium lepromatosis. Es curable y los medicamentos y la atención integral para personas afectadas por la enfermedad son gratuitos. El tratamiento dura de 6 a 12 meses según su clasificación.

¿Cómo se transmite?

De forma directa cuando una persona enferma sin tratamiento tose o estornuda sin cubrirse la boca o la nariz. No es hereditaria y no se contagia de manera ocasional.

Signos y síntomas de la Lepra o enfermedad de Hansen

Manchas planas o elevadas que aparecen en cualquier parte del cuerpo, pueden ser blanquecinas, rojizas u obrizas, usualmente no pican ni duelen. Sobre esas manchas no se siente el calor ni el dolor, sensación de hormigueo en la cara, obstrucción nasal, pérdida de la fuerza en los párpados, brazos, manos, piernas y pies. En las formas avanzadas de la enfermedad, se presenta engrosamiento de la piel, caída de las cejas y las pestañas y aumento del tamaño de las orejas.

Es importante recordar que el diagnóstico y el tratamiento oportuno son la clave para luchar contra esta enfermedad. Si no se trata a tiempo, puede causar lesiones progresivas y permanentes de la piel, los ojos, los nervios periféricos y las extremidades, causando discapacidad.